Lo que pasó, pasó

Hace un par de años las radios eran absorbidas por jóvenes brasileños, que a base de letras pegajosas (que nadie entendía, pero igual las aprendían), esculturales cuerpos y poco complejas coreografías de baile, lograban mover masas increíbles de muchachos desenfrenados por este nuevo movimiento musical, el Axé. En un comienzo todos los amaban. Al aparecer en la TV, los programas que lo exhibían alcanzaban altos puntos de rating y en las discos no se escuchaba otra cosa que el famoso "Chuchuca", sin embargo, al pasar el tiempo, la gente comenzó a aburrirse, los temas y bailes se volvieron muy monótonos, y el solo hecho de escuchar las canciones en portugués, para muchos llegaba a ser repulsivo. Con el pasar del tiempo, mas y mas gente comenzó a apestarse, hasta que la moda se extinguió. Hace unos meses uno de los grupos trato de volver, pero otro ritmo ya se había impuesto en el sistema, el Reaggeton.

A diferencia de su "antecesor", sobre este ritmo, por lo menos en nuestro país, se desconoce información de sus cantantes y no tiene coreografías pre-definidas. Solo a base de letras morbosas, fue capaz de sobresalir en el precoz mundo adolescente actual. Cerca de un año lleva ya sonando en las radios y discos, últimamente se a apoderado también de la televisión, y según se ve, aun le queda mucho tiempo mas. El mismo efecto que causo el Axé, es lo que esta logrando este ritmo centroamericano.

La primera vez que lo escuche fue en el verano del 2005, me pareció entretenido y chistoso. Ocho meses después, ya no lo es tanto, lo novedoso se perdió y aun no me repugna, pero no creo que falte mucho para que ocurra.